Evolucion del tejido empresarial en la CAV. Mayo 2016

Mayo 2016

Lo más destacable

  • Nuevo aumento del número de empresas inscritas en la Seguridad Social, que subió en mayo en el País Vasco en 226 empresas, lo que supone el tercer mes consecutivo de aumento, aunque creció menos que en mayo de 2015, mes en el que se crearon 549 empresas. Mayo finalizó con 59.083 empresas, 484 más que un año antes, con un crecimiento interanual del 0,8%, seis décimas menos que en abril.
  • En mayo creció el número de empresas en Araba y Bizkaia, y bajó en una empresa en Gipuzkoa. Respecto a mayo de 2015, crece el número de empresas en los tres territorios, con un ritmo de subida interanual más intenso en Araba (1,6%), que en Gipuzkoa (0,8%) y Bizkaia (0,9%).
  • El número de autónomos creció en mayo en Euskadi en 312 personas, alcanzando un total de 174.225. Este aumento es inferior al de mayo de 2015, cuando creció en 431 personas. En términos interanuales se produce, por tercer mes consecutivo, un ligero descenso del número de autónomos, de 214 personas. Desde el mínimo de agosto de 2013 sólo se han recuperado 2.873 de los 18.444 autónomos perdidos en la crisis.
  • El número de empresas en procedimiento concursal fue de 78 en el primer trimestre de 2016, un 22% menos que en los tres primeros meses de 2015, siendo el mejor dato para un primer trimestre desde 2008. Por sectores, la mayor caída del número de empresas concursadas se dio en servicios (-25%), seguido de industria (-16,7%), y construcción (-15%).
  • Por tanto, en mayo ha crecido tanto el número de empresas como el de autónomos, si bien a un ritmo muy débil, e inferior al logrado en mayo de 2015, y la evolución en el acumulado de los cinco primeros meses es peor que en el mismo período de 2015. Por su parte, la evolución del número de empresas concursadas sigue mejorando sus datos trimestre a trimestre, al continuar cayendo con intensidad, si bien todavía presenta valores superiores a los niveles pre-crisis.
  • Los datos de creación de empresas mantienen una tendencia alcista, pero débil, mientras que la evolución del número de autónomos continúa estancada, lo que dificulta el poder recuperar en un plazo de tiempo razonable el tejido empresarial perdido durante la crisis. Por ello, se necesita impulsar iniciativas y planes que favorezcan la reactivación económica y, con ella, la creación de empresas, y que sean capaces de elevar su competitividad, de manera que tenga mayor impacto la aportación de las empresas al crecimiento económico y del empleo.