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La industria vasca es el gran consumidor de energía eléctrica en Euskadi, hasta un 56% del total, según los años, con la siderurgia de punta de lanza. Por ello los precios de la electricidad son un importante factor de competitividad para unas empresas vascas que tienen que competir en un mercado europeo con referentes en Alemania y Francia con el hándicap de tener que abonar una tarifa eléctrica más cara. Un hecho que seguirá este 2021 pues la cotización de precios a futuro para 2021 del mercado eléctrico español a 30 de diciembre ha sido de 50,84 euros por MWh, un 12,9% más caro que hace un mes, y un 5,1% superior a la cotización del mercado alemán, según fuentes de AEGE, la asociación de empresas de gran consumo de energía. 

La compañía tecnológica donostiarra Voovio se apresta a dar un salto de gigante tras incorporar como socio a Moira Capital Partners, con sede en Madrid. Este fondo ha aportado a la compañía 15 millones de euros, la operación de más entidad de las realizadas en 2020 en el terreno de las empresas emergentes guipuzcoanas, un acuerdo que ha contado con el asesoramiento de la también guipuzcoana Norgestión. La sede de Voovio se encuentra en Igara. Dispone además de centros de trabajo en Madrid y Houston. Jaime Aguilera, cofundador y CEO de la firma, explica que la compañía se creó en San Sebastián porque los tres fundadores residían en la capital guipuzcoana en 2008, cuando se constituyó la sociedad. Dos de ellos procedían de Tecnun. La ampliación a Madrid vino impuesta por el crecimiento de la tecnológica.

En Berantevilla el ERE de extinción se ha zanjado definitivamente con 55 despidos de trabajadores, que a partir del 1 de febrero dejarán de pertenecer a esta firma dedicada a la construcción de grandes aeroestructuras para clientes como Airbus o Embraer. Así se lo trasladó la dirección al comité de empresa en una reunión en la mañana de Nochevieja. La cifra inicial planteada por la compañía de 101 salidas –para «defender la supervivencia de la empresa adecuándola a la nueva realidad del mercado para los próximos años», argumentó Aernnova al presentar el ERE– se redujo en un primer momento a 82 y ahora se queda en 55, después de que 27 empleados se hayan adherido al plan de salidas voluntarias. Esta factoría cuenta en la actualidad con más de 450 trabajadores. De estas 27 bajas, 14 serán a través de prejubilaciones de personas a partir de 58 años y que percibirán el 65% de su retribución bruta. 

El antiguo operario, de 38 años, robó una excavadora en Legutiano, recorrió 21 kilómetros e irrumpió con ella en el parking de vehículos de la planta de Júndiz. Circuló más de 20 kilómetros por carreteras alavesas, irrumpió en el aparcamiento de automóviles recién ensamblados que la planta de automoción tiene en Júndiz, junto a sus instalaciones, y arremetió contra casi 70 furgonetas nuevas. Por qué lo hizo, solo él lo sabe: hace ya cuatro años que había finalizado su vinculación profesional con la empresa automovilística. Según las fuentes consultadas por EL CORREO, recientemente había sido despedido de una empresa vinculada con la construcción, ubicada en el polígono de Gojain. Acabó detenido tras provocar daños que, a tenor del precio de venta de las furgonetas ‘premium’ que la división alemana monta en Vitoria, superarían los cinco millones de euros.

Reivindica de esta forma su papel como el gran actor en el que se ha convertido. La iniciativa está muy ligada a la actual presidencia del grupo, liderado por Iñigo Ucín. En la actualidad, la representación del mundo cooperativo en el consejo de la SPRI recae en el propio Ucín. En el plano empresarial privado, la Corporación Mondragon y sus cooperativas asociadas están adentrándose en múltiples foros y organizaciones como APD Zona Norte, Adype o las propias Cámaras de Comercio. La próxima meta que se ha fijado el mundo cooperativo es acceder al consejo de administración del Servicio Vasco de Empleo, Lanbide. No se trata de una nueva meta, sino de una vieja reivindicación, que ha chocado de lleno con la negativa de la patronal vasca Confebask, que no está dispuesta a ceder uno de los cinco vocales que tiene en este organismo a una organización que se rige por otros ordenamientos jurídicos diferentes a las sociedades de capital. El avance más significativo logrado por las cooperativas ha sido su calificación como «agente social específico» en la nueva Ley de Cooperativas. 

Los trabajadores del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ) afrontan 2021 preocupados por el posible cambio de propietarios en la sociedad y por los puestos de trabajo. Como recuerda el comité de empresa en su última comunicación a los trabajadores, la sociedad ha puesto en marcha un plan de bajas para los trabajadores mayores de 58 años de edad al que se podrán acoger de forma voluntaria los integrantes de dicho colectivo de edad. La intención de la compañía es reducir la plantilla amortizando dichos puestos de trabajo, según las fuentes citadas. Los trabajadores del IMQ temen que una hipotética toma de control por parte de Adeslas incidiría negativamente en sus puestos de trabajo y afirman que "todo nos hace pensar que nos espera un 2021 complicado lleno de incertidumbre por nuestro puesto de trabajo".

Los autónomos empiezan 2021 con un alza de las cotizaciones, la segunda que sufren en dos meses, en plena pandemia, en un año en el que el Gobierno quiere implantar el sistema de cotización por ingresos reales, que puede suponer una subida de más de 1.000 millones para una parte importante del colectivo. En enero vuelven a subir los tipos de los autónomos por segunda vez en dos meses. Se trata de un alza de una décima por cese de actividad, por el que cotizan todos los autónomos desde 2019, y de dos décimas por contingencias profesionales, que se suma a la que opera desde 30 de octubre, que ya fue de una y dos décimas, respectivamente, con lo que las cotizaciones de este colectivo se han incrementado en dos y cuatro décimas entre octubre y enero en plena pandemia. Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA, ha lamentado que el Gobierno no haya pospuesto esta subida. 

Los permisos de padres y madres por nacimiento y cuidado de un hijo ya están equiparados, después de que ayer entrara en vigor la ampliación del permiso de paternidad a 16 semanas. Hasta ahora, los hombres disfrutaban de doce semanas por nacimiento o adopción. La Seguridad Social espera que 236.000 progenitores se beneficien en 2021 de estos permisos, para los que se destinarán 2.784 millones de euros, una partida un 11,4 % superior a la de 2020. Con la nueva regulación, además, tanto padres como madres disfrutarán juntos de las primeras seis semanas de ese permiso, coincidiendo con el primer mes y medio de la vida del bebé (o del inicio de la adopción), un periodo que hasta ahora era de cuatro semanas. Las restantes 10 semanas son voluntarias y se tendrá que acordar con la empresa si se usan a tiempo completo, de forma ininterrumpida o incluso podría hacerse a tiempo parcial o por semanas sueltas. La equiparación llega en 2021 tras una ampliación continuada desde 2018. 

El año fue amargo. También para la Bolsa. Y más para el Ibex-35, que cayó un 15,45%, para cerrar en los 8.073,7 enteros, en su mayor descenso desde 2010. En Europa, sólo el Ftse 100 británico (-14,34%) tuvo una caída parecida, ya que el Cac 40 francés limitó su descenso a poco más de un 7% e incluso el Dax alemán terminó con una nada despreciable ganancia del 3% y en cotas récord. El cierre de año para el selectivo, con todo, implica un rebote del 32% respecto a los mínimos de 6.100 puntos que marcó en marzo, tras el inicio del confinamiento. Pero supone una pérdida del 20% desde los máximos que había alcanzado en febrero sobre los 10.000 enteros: antes de la globalización del Covid, el año parecía no pintar mal.

Con la culminación del Brexit ayer son muchas las dudas que surgen en torno a cómo podrán operar a partir de ahora ciudadanos y empresas con la salida británica de la UE. La salida de Reino Unido del club comunitario suscita múltiples dudas a ciudadanos y empresas sobre cómo les afecta su entrada en vigor. 

Iñigo Urkullu dio carpetazo a un año «inimaginable hace doce meses» con un mensaje centrado en el reconocimiento a los profesionales que han combatido a la pandemia en primera línea, a los sectores económicos que están sufriendo «el embate» de la crisis y con varias advertencias a futuro. Porque si algo recalcó el lehendakari en su tradicional discurso de Nochevieja es que aunque la vacuna se ha convertido en un elemento para la esperanza, no hay que bajar la guardia. «Hemos adoptado decisiones excepcionales. Lo vamos a tener que seguir haciendo», admitió el jefe del Ejecutivo. Doce meses después de que Urkullu compareciese a finales de 2019 para defender el autogobierno, el escenario ha cambiado de forma radical. El lehendakari afronta 2021 con una mayor estabilidad política gracias a la mayoría absoluta que tiene el Gobierno de coalición con el PSE tras las elecciones del pasado mes de julio. A partir del próximo día 11 empezará la negociación de los Presupuestos y el Ejecutivo tiene asegurada su aprobación.

Sin haber abandonado la segunda ola de la pandemia y cuando aún se desconocen los efectos que haya podido tener la relajación parcial de las restricciones con motivo de las fiestas navideñas, Euskadi se adentra en 2021 con datos nada esperanzadores que alientan el temor a una tercera ola. La cifra de contagios repunta y vuelve a niveles de hace quince días, para situarse en el entorno de los 500 casos diarios. Y no porque se hayan realizado más test, sino porque el porcentaje de positivos sobre el total de pruebas validadas ha aumentado. Además, y aunque entraba dentro de la lógica, la confirmación de que también hay en el País Vasco positivos de la llamada cepa británica, una variante del coronavirus más contagiosa, con al menos seis casos detectados, añade otro frente de atención para las autoridades sanitarias.