20200704

Pascal Gómez aspira a repetir y competirá con 12 empresas por 6 plazas. Hay 33 candidatos para los 14 puestos en liza. En esta ocasión no será una asamblea más. Como sucede cada dos años, la patronal renueva la mitad de su junta rectora y uno de los 14 puestos que se someten a esa revalidación es el que ostenta el presidente, Pascal Gómez, en representación de su empresa Auxitec. Se prevé una pugna superior a años anteriores en todas las categorías. Un total de 33 candidaturas competirán por las 14 vacantes en juego, cuando en 2018 concurrieron 24 firmas. Repiten como aspirantes prácticamente todos las que han de renovar plaza –algún empresario lo hace con una sociedad distinta–, y entre los nuevos destaca la presencia del Deportivo Alavés, la Fundación 5+11 –también vinculada a Alavés y Baskonia–, Bodegas Luis Cañas, Construcciones Fernández de Nograro o el Hotel Jardines de Uleta.

Activa un fondo de 10.000 millones para entrar en negocios solventes y pone en marcha otro ICO de 40.000. La crisis del coronavirus también derivará en el rescate público de empresas, tal y como ocurrió con la recesión de hace una década. Aunque en esta ocasión, el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos ha introducido notables diferencias con las decisiones adoptadas en su día por el Ejecutivo de Rajoy. El Estado auxiliará a compañías afectadas por este entorno económico tan desfavorable como imprevisto: lo hará adentrándose directa o indirectamente en su capital. La nueva iniciativa, dotada con 50.000 millones de euros, persigue que España «vuelva al crecimiento y a la recuperación» tras la pandemia, agregó Sánchez. Y con ello, evitar la depresión del país al servir de soporte a «miles de puestos de trabajo», muchos de los cuales dependen ahora de la pervivencia de los ERTE.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presidió este viernes la firma del Pacto por la Reactivación Económica y el Empleo con los líderes de la CEOE, Cepyme, CC OO y UGT, una declaración que incluye compromisos para reactivar el empleo, para transitar hacia una economía verde y digital y un plan de financiación empresarial. Sánchez explicó que el Gobierno tiene previsto utilizar los fondos que vengan de Europa para un plan de inversiones y reformas presupuestado en cerca de 150.000 millones de euros. “Es un desafío mayúsculo para el que queremos contar con toda la sociedad”. Sánchez y los líderes de CC OO, UGT, CEOE y Cepyme, Unai Sordo, Pepe Álvarez, Antonio Garamendi y Gerardo Cuerva, respectivamente, ratificaron en el Palacio de La Moncloa su compromiso de alcanzar un pacto por la creación de empleo y la reactivación económica. Ver pacto

Disenso en medio del consenso. Gobierno, sindicatos y patronal se felicitaron por el Acuerdo por la Reactivación Económica y el Empleo que suscribieron ayer a las puertas de La Moncloa, una prueba de que «cuando España acuerda, España avanza», en palabras del presidente Sánchez. Pero hubo roces de calado que empañaron la celebración, reivindicada como una señal de la cultura de la «concertación social» por Unai Sordo, el líder de CC OO; o una demostración de que «la paz social es la mejor infraestructura de un país», a juicio de Antonio Garamendi, el presidente de la CEOE. El foco del conflicto estuvo en los impuestos. La CEOE cree que «no es el momento» de elevar la presión impositiva, y las pymes advierten que repercutiría en el crecimiento económico. 

La crisis económica causada por la covid-19 está lejos de terminar, pero en distintas latitudes ya ha comenzado el debate sobre cómo pagar la enorme factura que está dejando. Bruselas ha propuesto crear nuevos impuestos para recaudar 44.000 millones con los que pagar parte de fondo anticrisis; en Latinoamérica ha vuelto a saltar a la palestra la subida fiscal a los más ricos; países como Arabia Saudí han incrementado sus gravámenes y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ve “inevitable” una próxima reforma fiscal. Porque pese a las dudas que rodean este tsunami sanitario, está claro que tendrá un importante efecto secundario y dejará tiritando las finanzas públicas de medio mundo.

Ni la derogación de la reforma laboral ni un impuesto a las grandes fortunas formarán parte del plan de recuperación pactado ayer en el Congreso. La Comisión para la Reconstrucción social y económica creada en el Congreso dio por cerradas las conclusiones del plan de medidas de reactivación tras el impacto de la crisis del coronavirus. En contra del criterio del PSOE, el Congreso sacó adelante el desbloqueo de los superávit municipales acumulados en 2019 y 2020, no aplicar la regla de gasto hasta 2022 y eliminar las condiciones al rescate de empresas, como no repartir dividendos en dos años y no operar con paraísos fiscales. Además, se rechazó derogar la reforma laboral, la creación de un impuesto a las grandes fortunas, y se acordó revisar los impuestos de Patrimonio, Donaciones y Sucesiones.

La duda que mantenía en vilo a concesionarios y usuarios en las últimas semanas se ha resuelto de la mejor manera posible: las ayudas contempladas en el plan Renove estatal y vasco se podrán sumar, lo que supone llegar a 3.600 euros para un diésel o gasolina y a 8.000 para un eléctrico. Así se lo confirmó ayer el Ministerio de Industria al departamento homólogo del Gobierno vasco, que había pedido aclaraciones. Lo zanjó justo el día en el que el Consejo de Ministros dio luz verde al programa nacional y anunció que se podrá aplicar a compras realizadas desde el 16 de junio. Previsiblemente hoy saldrá publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) con todos los detalles.

La compañía, que han promovido MásMóvil y Dominion, apuesta por «la sencillez y la transparencia» como sus valores diferenciadores. Guuk tendrá 115 puntos de venta y en Bilbao su sede operativa, con 100 empleados. Nace centrada en el mercado residencial, aunque no descarta crecer en el futuro. ‘Volvamos a conectar’. Con esta premisa que apela a la tradición vasca y a sus valores identitarios se presenta Guuk, una nueva operadora de telefonía que ha nacido «por y para las personas de aquí» y que ofrece servicio a los hogares de Euskadi y Navarra. «Somos un proyecto con un alma especial, que quiere volver a conectar con nuestra tierra, nuestros valores y nuestras raíces», explicó ayer su presidente, Jon Ander de las Fuentes, en la presentación de Guuk en Bilbao.

La industria de la construcción en Euskadi aumentó un 12,5% durante 2019, fundamentalmente apoyada por la edificación, y continuará creciendo durante este ejercicio impulsada por la construcción de viviendas, la rehabilitación y un repunte de la obra civil. Así lo ha destacado el presidente del cluster vasco de la construcción-Eraikune, Alberto Marín, quien avanzó que para 2020 la rehabilitación de viviendas está ofreciendo mejores cifras, pero el sector «no crece al ritmo que debería».

La multinacional Daimler está estudiando la venta de la planta de ensamblaje de Mercedes-Benz de Hambach, en Francia, con el propósito de mejorar su estructura de costes y aumentar la eficiencia, sobre todo tras el impacto que ha provocado la crisis del coronavirus en el sector. Así lo anunció ayer la compañía, propietaria de las plantas de la marca, incluyendo la de Vitoria. Según explica la empresa en su comunicado, su objetivo es flexibilizar y adaptar la producción a las condiciones actuales de mercado, que ha registrado un hundimiento de las ventas a raíz de las medidas de confinamiento puestas en marcha por todos los gobiernos a nivel mundial.

Este galardón, que se otorga a empresarios y profesionales con una trayectoria de al menos 10 años en la que la innovación haya sido una de las características relevantes, ha recaído en esta edición en Galán “por su capacidad de liderazgo en la transformación innovadora de empresas de diversos sectores tecnológicos”, señaló la compañía en un comunicado. El jurado ha valorado especialmente la capacidad del ejecutivo de Iberdrola “para liderar la transición energética en España, siendo pionero en el desarrollo de energías renovables y sabiendo posicionar la industria eléctrica española entre las más competitivas y punteras del mundo”, añade.

Sanidad insiste en que la pandemia continúa bajo control y que sigue sin haber contagios comunitarios que enciendan las alertas. Pero son ya casi dos semanas de registros negativos sobre infecciones, y los rebrotes no paran de crecer y ayer alcanzaron los 67. Las estadísticas se empeñan en apuntar que el virus se está propagando a mucha más velocidad que a mitad de junio, cuando la epidemia tocó suelo.

7.002 personas que han dado positivo a la prueba de la Covid-19 han sido hospitalizadas en Euskadi desde marzo. Son datos del Ministerio de Sanidad publicados en la tarde de ayer. Los ingresados representan prácticamente uno de cada tres de los 21.115 casos totales detectados por el Departamento de Salud por medio de pruebas PCR y test rápidos. La cifra impresiona –la última campaña de la gripe dejó 1.304 ingresos en cinco meses– y muestra la virulencia de un patógeno que en las últimas semanas parece haber perdido fuerza. Y no solo porque la propagación del virus sea menor y se haya reducido a rebrotes y casos puntuales. También porque las pocas personas contagiadas que acuden estos días a los centros hospitalarios con complicaciones respiratorias no presentan los cuadros tan graves que se veían en marzo y abril, destacan fuentes sanitarias.