20200618

La nueva presidenta de la FVEM, Tamara Yagüe, alerta de la recesión en la automoción y pide que los ERTE se prorroguen hasta diciembre. El sector vizcaíno del metal, del que dependen cerca de 50.000 empleos, sigue muy afectado por el golpe del coronavirus a la actividad económica. Un 81% de las empresas ha sufrido una caída en su facturación, estimada en torno al 30% en los cinco primeros meses de 2020, y un 28% advierte de que «tendrá que reducir su plantilla». Por ramas, la automoción es la que presenta un panorama más negro al encontrarse en «fuerte recesión» y no esperar su recuperación hasta dentro de más de un año.

La posibilidad de un acuerdo para la continuidad de los ERTE se aleja. Los sindicatos, los empresarios y el Gobierno finalizaron ayer su reunión sin acuerdo y sin fecha para volver a la mesa de negociación, según apuntan fuentes de las conversaciones. Los cuatro agentes sociales (UGT, CC OO, CEOE y Cepyme) se presentaron con una propuesta conjunta para prorrogar hasta el 30 de septiembre la regulación actual, que permite a las empresas decidir si salen parcialmente del ERTE o continúan acogidas a él totalmente. El Ministerio de Trabajo rechazó en la tarde de ayer que las empresas puedan seguir acogiéndose de forma total al ERTE. El departamento de Yolanda Díaz argumenta que pronto decae el estado de alarma y sus restricciones; y que no tiene sentido que siga abierta la posibilidad del paro completo.

La vicepresidenta y ministra de Economía, Nadia Calviño, destacó ayer en el Congreso de los Diputados que España está experimentando un “cambio de tendencia” tras el fin de la hibernación económica propiciada para frenar la pandemia del coronavirus, asegurando que los indicadores, como el del empleo, muestran que la fase de recuperación económica “ya se ha iniciado”. Así, en el marco de la sesión de control al Gobierno, especificó que “ahora mismo hay más de un millón de trabajadores que ya han salido de los ERTE y casi 300.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social por cuenta ajena”. Afirmó que la “extrema incertidumbre” de la situación hace “particularmente difícil hacer previsiones económicas”, pero que el Ejecutivo mantiene sus estimaciones, por las que calcula que el PIB caerá un 9,2% este año y crecerá un 6,8% en 2021.

El coronavirus ha empujado a la economía a un precipicio cuya profundidad solo ahora empieza a vislumbrarse. En las dos primeras semanas de confinamiento, del 16 al 31 de marzo, la actividad en España se derrumbó un 34%, frente a la media del 21% de la eurozona. Esta mayor caída se explica en parte por las medidas adoptadas para contener la expansión de la pandemia, más severas que las de otros vecinos europeos. Entre las grandes economías del área solo Italia, la primera en vivir con dureza la furia de la covid-19, experimentó un desplome similar, según una nota publicada ayer por el Banco de España.

Bruselas quiere dotarse de poderes para controlar y sancionar a las empresas que operan en la UE con subsidios foráneos, vetar opas de empresas dopadas con dinero estatal y prohibir su participación en concursos públicos. La UE quiere levantar una triple muralla entre su tejido empresarial, debilitado por la crisis del coronavirus, y los cazadores de gangas extracomunitarios que, reforzados con capital público, pretenden obtener ganancias en el río revuelto de la pandemia, como ya sucedió tras la crisis de 2008 cuando las empresas chinas entraron en tromba en compañías europeas.

Desconcierto absoluto en los concesionarios vascos, que no tienen una respuesta cierta que ofrecer a quienes se acercan estos días a sus exposiciones sobre la eventual compatibilidad de las ayudas a la compra de coches diésel y gasolina establecidas en el plan presentado el lunes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y las ya vigentes en el Eusko Renove, que según ha confirmado DV ha favorecido ya a 590 personas, movilizando 1,2 millones, con 2.053 euros de media por operación, con lo que quedarían ayudas para otras 3.964 compras. Las preguntas de los clientes se acumulan, pero faltan respuestas, con lo que los vendedores solo pueden encomendarse a la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de la norma que ponga la letra pequeña a la iniciativa del Ejecutivo central. Una publicación que, para más confusión, nadie sabe situar en el tiempo.

Entre junio y septiembre del año pasado más de 676.000 extranjeros eligieron Euskadi como destino para sus vacaciones, con Francia, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos como principales países emisores. Un dato revisado con orgullo al cierre de los ejercicios anteriores por tratarse de un perfil de viajero más generoso con la zona que visita, pero que este 2020 provoca escalofríos al sector. Tras el acelerón turístico del último lustro, los extranjeros han llegado a representar en Euskadi en los meses de verano el 46% de total de los visitantes, y este año van a dejar un vacío difícil de llenar. El Departamento de Turismo pone en marcha una campaña con más de 120 itinerarios centrada en atraer al «turista local y nacional». 

El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción de contratos anunciado por Sener el pasado 29 de mayo y del que hasta ahora no se conocían más detalles, afectará a un máximo de 110 empleados de los 1.600 que la compañía vasca tiene en España –en total suma 2.300 en todo el mundo–, según comunicaron ayer fuentes de la empresa. De ese número máximo, 45 despidos corresponderían a las instalaciones que albergan su sede social en la localidad vizcaína de Getxo, donde trabajan 380 personas. No obstante, cabe señalar que se trata de los despidos máximos fijados en principio por Sener y que esas rescisiones de contratos podrían verse reducidas al final del preceptivo periodo de consultas y negociación del ERE entre la empresa y los representantes de los trabajadores.

Siemens Gamesa ha destituido como consejero delegado a Markus Tacke, que ocupaba este puesto desde mediados de 2017, tras anunciar que cerrará con pérdidas su ejercicio fiscal 2020, que concluye en septiembre. En paralelo, el grupo de energías renovables ha nombrado a Andreas Nauen, CEO de la división offshore desde 2017, como nuevo consejero delegado en sustitución de Tacke, que abandona el consejo de administración, según informó anoche la compañía en un comunicado remitido a la CNMV. Estos cambios se producen después de que la compañía haya informado cerrará el ejercicio actual con pérdidas como consecuencia del Covid-19. 

El Gobierno está decidido a eliminar a toda costa la discriminación retributiva en las empresas entre el hombre y la mujer y, para ello, se propone aumentar las obligaciones en este sentido de todas las sociedades con más de 50 trabajadores. Incluso, en algunos casos, los nuevos requisitos de igualdad retributiva afectarán también a las empresas con menos de 50 empleados. En líneas generales, todas las empresas con 50 o más trabajadores deberán contar con un plan de igualdad, un registro retributivo, una auditoría salarial interna y otra externa. Así se establece en los dos borradores de reglamento por los que se regulan todas las condiciones que deben tener las empresas para garantizar la igualdad salarial entre el hombre y la mujer en sus plantillas.  Trabajo creará una Oficina de Prevención de la Brecha Retributiva para denunciar ante la Inspección a empresas incumplidoras. Las sanciones pueden ascender hasta 187.500 euros.

Los funcionarios de la Administración General del Estado (AGE) podrán teletrabajar cuatro días a la semana para cuidar a menores de 14 años, mayores y personas dependientes y con patologías de riesgo por el coronavirus, según establece el acuerdo sobre organización del trabajo y conciliación en el sector público que cerró ayer el Ministerio de Política Territorial y Función Pública con UGT, CSIF y CIG. El resto de funcionarios podrá trabajar en remoto al menos un día a la semana. Este marco estará en vigor desde el 21 de junio, día que decae el estado de alarma, y el momento en que el Gobierno certifique que ha acabado la crisis sanitaria. Los empleados públicos de comunidades y ayuntamientos seguirán previsiblemente este patrón en futuros acuerdos, según suele ser habitual.

Alemania ha registrado un gigantesco foco de infección de coronavirus en una gran industria cárnica al oeste del país. Al menos 657 personas han dado positivo desde el inicio de la semana en un matadero y una planta de empaquetado de la empresa Tönnies en Renania del Norte-Westaflia. En las inmediaciones de la planta de Tönnies, unas 7.000 personas han sido puestas en cuarentena.

Los profesionales sanitarios han recibido con iguales dosis de esperanza y cautela la noticia de que uno de los fármacos utilizados en la terapia contra el Covid-19 parece que tiene –ahora sí, parece que demostrado científicamente– la capacidad de reducir la mortalidad. La dexametasona, un derivado de la cortisona muy utilizado en el ámbito médico desde hace décadas, permite salvar la vida de uno de cada ocho pacientes que precisan ventilación mecánica y uno de cada veinticinco necesitados de oxígeno. «Dará tranquilidad a los médicos que recurrieron este medicamento para salvar vidas con el rechazo de sus compañeros». 

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha abierto la sesión dando paso a la primera mesa de la jornada, dedicada a la industria, “el sector generador de más y mejor empleo”, en palabras del presidente. Javier Ormazábal, presidente de Velatia y del Círculo de Empresarios Vascos. ha dicho que " es necesario reforzar la competitividad, consolidar los procesos de smartización y aplicar políticas que conduzcan a la reducción de emisiones. “Así mismo, se precisa de una política fiscal estable y coordinada entre administraciones que impulsen el esfuerzo inversor y las estrategias empresarias que respondan a los ODS impulsados por las Naciones Unidas”. Ya en la mesa sobre el automóvil, Francisco José Riberas, presidente de Gestamp, ha planteado medidas para acabar con esas deficiencias estructurales, como son la reforma del sistema educativo y de FP; fomentar el espíritu empresarial y trabajar para que la contribución al PIB de la industria alcance el 20%". Sobre  el Plan de Impulso a la Industria de Automoción, presentado el lunes por el Gobierno, con medidas “todas positivas para el sector”, ha continuado Riberas, “debe ponerse en marcha de manera decidida y lo antes posible”. 

La industria del automóvil advirtió ayer al Gobierno de que, más allá del plan de apoyo anunciado el martes, debe actuar con «rapidez» para que las marcas opten por las fábricas españolas para producir sus nuevos modelos. Los principales representantes del sector destacaron en la tercera jornada de la Cumbre Empresarial de la CEOE la necesidad de que España se muestre como «un país amigo» de la automoción. Y que lo haga mediante la extensión de los ERTE por fuerza mayor derivados de la crisis del coronavirus hasta que la recuperación sea una realidad a finales de año.

Las fábricas quieren volver a tener el protagonismo que han ido perdiendo en la economía a lo largo de las últimas décadas para conseguir una recuperación más rápida y, sobre todo, en mejores condiciones, tras la crisis. Los representantes de la industria recomendaron al Gobierno que acelere las medidas para conseguir que el sector represente un 20% del PIB estatal. A día de hoy, apenas supera el 14%, muy lejos de la media de otras grandes potencias europeas, como Alemania. Todos los empresarios coinciden en señalar que las economías con más peso industrial son las que a la vez han conseguido desarrollar «las sociedades con mayor nivel de vida». 

Los primeros espadas del sector industrial y del mercado agroalimentario español lanzaron ayer un mensaje directo y unánime al Gobierno: es su turno. El turismo, uno de los sectores principales de la economía española, ha resultado gravemente herido por la crisis del coronavirus y su incierta recuperación retrasará a su vez la recuperación del país. Por eso los empresarios y directivos que ayer se dieron cita en la tercera jornada de la Cumbre Empresarial organizada por la patronal CEOE aprovecharon la oportunidad para reivindicarse y pedir al Ejecutivo de Pedro Sánchez que apueste de verdad por ellos para reducir la dependencia turística y replantear las bases del modelo productivo español. Antonio Hernández, presidente de Ebro Foods, lo verbalizó de forma clara durante su intervención. «No estamos en contra del turismo y la construcción, pero esta hiperdependencia no es buena".