20191015

Más tarde de lo esperado, y por ahora con baja intensidad, ha llegado la desaceleración a las magnitudes macro de la economía vasca, según constataron ayer el consejero de Hacienda y Economía del Gobierno vasco, Pedro Azpiazu, y su viceconsejero Alberto Alberdi. Así, la previsión de crecimiento económico para Euskadi este año apunta un alza del PIB del 2,2% (una décima menos de lo esperado en verano) y que se mantenga el cálculo de que suba un 2% en 2020. Ante este menor ritmo de crecimiento, ambos llamaron a la prudencia y a evitar los alarmismos «sin sentido» en una economía que mantiene una sólida senda –casi de «privilegio», según Alberdi, al estar por encima del 2%– frente a un entorno con panoramas menos favorables. Véase el 1,3% previsto para el conjunto de la Unión Europea, el 1,1% de la zona euro, el 1,3% de Francia o el 0,5% de Alemania, que está a las puertas de la recesión económica, con lo que ello supone por ser la locomotora del Viejo Continente.

La prudencia en la gestión, una vez más, ha llevado al Gobierno Vasco a acelerar al máximo la amortización de deuda pública –que, no se puede obviar, se disparó en la crisis– para poder reaccionar, si fuera necesario, en caso de que el escenario se complicara sobremanera. Por eso, ayer, el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu anunció que el Ejecutivo amortizará (devolverá) 597 millones de euros a sus acreedores este año para dejar el capítulo del pasivo a cierre del ejercicio (del Gobierno y de sus sociedades dependientes) en 9.444 millones o, lo que es lo mismo, un 12,3% del PIB vasco; se trata de la mejor ratio, de largo, de toda España.«Eliminar deuda es una inversión a futuro, ya que mejora las posibilidades de respuesta ante posibles escenarios económicos más complicados», aclaró el consejero.

La Encuesta de Coyuntura Industrial que realiza la Cámara de Bilbao certifica que las previsiones de la industria vizcaína para lo que resta de año «son claramente menos optimistas» que a principios del ejercicio, pero en un contexto sin grandes sobresaltos. Un 20% de las empresas esperan poder elevar su producción en el cuarto trimestre, mientras que el 59% estiman es que se mantendrán en los niveles actuales. Hay un 22% que percibe un posible empeoramiento. Este se sustenta en que un 16% de las industrias consultadas prevén una subida en su cartera de pedidos, mientras que el 54% estima que se mantendrá estable. Para el restante 29% la situación apunta a un descenso de nuevos pedidos.

Los delegados metalúrgicos de los cuatro grandes sindicatos vascos comparecieron ayer en la sede de ELA para sacar músculo tras los cinco días de la huelga y movilizaciones que protagonizaron del 30 de septiembre al pasado día 4. Buscaban así presionar a la Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM) para que acceda a su lista de exigencias de cara a la firma del convenio colectivo del sector, con 50.000 trabajadores el principal de Euskadi.Las centrales, que no descartan nuevas movilizaciones, insistieron en su voluntad negociadora y respondieron a Iñigo Urkullu que, frente a las nueve respuestas que –según el lehendakari– FVEM habría brindado a las peticiones sindicales desde mayo, la patronal solo ha dado la réplica en una ocasión, si bien los empresarios agregaron algunas mejoras a su contrapropuesta inicial. 

La Diputación de Bizkaia admitió ayer, de forma oficial, que hay fuga de contribuyentes a otras comunidades autónomas a la búsqueda de una fiscalidad más amable y menos gravosa. En concreto, el diputado de Hacienda, José María Iruarrizaga, se refirió al Impuesto de Sucesiones y Donaciones –el que grava las herencias de los fallecidos o las cesiones ‘inter vivos’–, hasta el punto de advertir que este es un tema que será necesario analizar cuando se plantee la reforma fiscal, prevista para 2020. «Hay contribuyentes que se están marchando a otras comunidades para pagar menos en Sucesiones y tenemos que revisar la normativa para adaptarnos a nuestro entorno», puntualizó.

El conflicto laboral que afecta a la educación concertada en Euskadi tiene difícil solución y los centros no son nada optimistas con que la resolución de las discrepancias entre patronal y sindicatos pueda llegar a corto plazo. Un día antes de que las centrales concreten hoy en rueda de prensa la convocatoria de los próximos paros –se baraja que las huelgas se prolonguen de forma intermitente durante un mes entre el 7 de noviembre y el 5 de diciembre–, Ikasgiltza, la asociación que agrupa a las cooperativas vascas de enseñanza, trasladó ayer en el Parlamento vasco la resignación con la que ven la situación. Su presidente, Mikel Gastañares, señaló que «el conflicto está enquistado» y detalló cómo, aunque el clima creado de confrontación entre plantillas, familias y patronal también les «influye», la incidencia de los paros en los quince centros que componen su asociación «ha sido residual» gracias a las medidas adoptadas a nivel «interno».

Para que Zorrozaurre se convierta en esa anhelada «isla del conocimiento», se deben cumplir los dos requisitos que bautizan el propio concepto. Tras la apertura del canal de Deusto hace un año, nadie puede negar que el primero ha quedado satisfecho, pero ahora hay que rematar el segundo. Es el momento de llenar esta zona de proyectos formativos e investigadores que se sumen a Digipen, la universidad del videojuego que entró en funcionamiento el pasado curso. Pues bien, el despegue definitivo se va a producir en septiembre del año que viene de la mano de Mondragon Unibertsitatea, que estrenará su sede en el edificio Beta II con cuatro carreras, un máster universitario y otros dos títulos propios. Todo un espaldarazo al futuro de Bilbao, en busca de vitamina joven para hacer frente al imparable envejecimiento social.

La Plataforma de Accionistas del IMQ, PAI, creada por el sector que busca liberalizar la venta de las acciones de esta aseguradora médica que tiene una elevada cuota de mercado en el País Vasco, celebraron ayer su segunda asamblea en un hotel de Bilbao. Sus reprentantes informaron de que han iniciado un proceso de conversaciones con el consejo de administración de la compañía y que se dan hasta finales de año para «intentar alcanzar un acuerdo». De lo contrario, anticiparon, seguirán con su proceso de sumar apoyos para tratar de forzar una junta extraordinaria de accionistas en la que se plantearía un cambio de los estatutos. El objetivo es poder vender las acciones a un valor de mercado.

El Instituto de Estudios Económi­cos (IEE) publicó ayer el Índice de Competividad Fiscal, documento en el que sostiene que la presión impositiva en España es superior a la de la media de la Unión Europea. En concreto, afirma que «la presión fiscal normativa en España es del orden de un 8% superior a la media de la UE», y contradice así al Go­bierno de Pedro Sánchez que seña­la que las cifras españolas son infe­riores y que es necesario conver­ger con la media europea. 

Con una sola afirmación, el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, intentó zanjar ayer cualquier atisbo de derrotismo en torno a la evolución de la economía. Así, trató de calmar a los mercados al descartar que la zona euro vaya a entrar en recesión; esto es, en una caída prolongada del PIB durante más de dos trimestres. «Tiene una posibilidad muy reducida, no se va a producir en absoluto», indicó el también exministro de Economía. Al mismo tiempo, De Guindos recordaba que el «principal riesgo» que tiene la economía es enfrentarse a una etapa de «crecimiento muy reducido» durante un plazo «muy dilatado». Esto es, que la zona euro, en general, y España, en particular, podrían crecer mínimamente, estancadas. «El entorno global va a estar marcado por la desaceleración». 

La asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) se inaugura hoy con el sello del enfriamiento económico en todo el mundo. Las perspectivas del organismo que va a presentar su nueva directora gerente, Kristalina Georgieva, rebajarán las previsiones conocidas el pasado verano. Sin embargo, el acercamiento entre Estados Unidos y China en su conflicto comercial en los últimos días y la perspectiva de que puede haber un Brexit pactado han traído cierto optimismo a la cita en los últimos días. No obstante, todavía es muy pronto para saber si ese atisbo de esperanza se confirmará.

La producción industrial de la zona euro registró en agosto un avance del 0,4% respecto al mes anterior, cuando se observó una contracción de cuatro décimas. En tasa interanual registró un descenso del 2,8%, siete décimas más que en julio, según los datos publicados ayer lunes por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística. Este indicador cobra importancia en un momento en que la industria europea sufre las secuelas de la guerra arancelaria entre EE UU y China. Y, sobre todo, los cambios regulatorios sobre emisiones que afectan al sector del automóvil. Alemania, donde la industria representa cerca del 30% del PIB, es uno de los países europeos más afectados por la crisis del sector automotriz. Esta leve mejora de los datos representa un ligero alivio respecto a los meses pasados. 

Las tensiones comerciales entre EEUU y China le han pasado factu­ra al comercio bilateral entre am­bos países el pasado mes, a pesar del acuerdo alcanzado el viernes para evitar una subida de los aran­celes al país asiático. De hecho, ayer se conoció que la firma del acuerdo comercial entre los dos gigantes podria ocurrir a m­ediados de noviembre en Chile, en paralelo a la cumbre del Foro de Co­operación Económica Asia-Pacífico (APEC), según manifestó ayer el se­cretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin. Éste aseguró que a lo largo de la semana se llevarían a cabo comunicaciones entre los negociadores. 

La sentencia del Tribunal Supremo tuvo la inusual habilidad de poner de acuerdo a constitucionalistas e independentistas. Se abre una nueva etapa, coincidieron Pedro Sánchez y Quim Torra. Pero son las jugarretas de la polisemia. Nueva etapa para el presidente del Gobierno significa que se ha acabado el ‘procés’ entendido como hasta ahora. Nueva etapa para el presidente de la Generalitat supone que a partir de ahora hay que avanzar con renovado ímpetu hacia la república. En todo caso, el fallo del Supremo marca un antes y un después en la crisis de Cataluña. Como aperitivo, se reactivó la euroorden de detención y entrega para Carles Puigdemont. El tribunal sostiene que su estrategia ha sido un engaño culminado con una «simbólica e ineficaz» declaración de independencia. La noche estuvo jalonada de numerosos incidentes. 

La clasificación en tercer grado y la concesión de permisos quedan en manos de la Generalitat, tras rechazar el tribunal las restricciones que solicitaba el fiscal. Los presos pueden solicitar los permisos cuando hayan cumplido la cuarta parte de la pena: a Sànchez y Cuixart les faltan sólo tres meses. El Departamento catalán de Justicia, que es el competente, tiene dos meses para clasificarlos en segundo o tercer grado. Algunas voces ya han destacado que incluso podrían pasar en casa parte de la Navidad. Junqueras, con la pena más larga, sería el que más tendría que esperar –en torno a quince meses– para solicitar esos beneficios penitenciarios, cuya concesión también depende de la Administración autonómica.

UGT y Comisiones Obreras se uni­rán a una «gran manifestación trans­versal» el próximo 26 de octubre en protesta contra la sentencia conde­natoria a los líderes independentis­tas catalanes. l.os dos sindicatos su­marán sus fuerzas con más de un centenar de entidades sociales, entre las que se encuentran la Asamblea Nacional Catala­na (ANQ y Omnium Cultu­ral, para mostrar su rechazo al veredicto dictado ayer por el Tribunal Supremo. 

«Los galardonados de este año han introducido un nuevo enfoque para buscar los mejores caminos para luchar contra la pobreza global, concentrándose en aspectos concretos y manejables como, por ejemplo, la búsqueda de las intervenciones más eficaces para mejorar la salud infantil o la educación», según resaltó la academia en un comunicado.En concreto, Kremer y sus colegas, a mediados de la década de los 90, demostraron la eficacia que pueden tener esas aproximaciones utilizando experiencias de campo para evaluar una serie de intervenciones que pudieron mejorar los resultados escolares en el oeste de Kenia.