20180404

Los Presupuestos para el presente año, cuya aprobación depende del PNV, elevan en un 32% la inversión del Estado en Euskadi, que ascenderá a 509 millones de euros. Este incremento supera en más del doble a la media nacional y eleva el peso de la inversión en Euskadi al 5,04% del total, el guarismo más alto en los últimos once  años. Las obras del TAV absorberán la mayor parte de ese desembolso, que también incluye mejoras en los tres aeropuertos vascos y en los puertos de Bilbao y Pasaia. El Gobierno de Rajoy lanza así un guiño a los jeltzales, que se han negado a negociar siquiera el proyecto mientras siga en vigor el 155 en Cataluña.

Los Presupuestos están «pensados para los pensionistas, servidores públicos y para financiar mejor los servicios públicos fundamentales», afirmó ayer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al presentar las cuentas de 2018 en el Congreso con seis meses de retraso. Nunca mejor dicho: el gasto en pensiones y funcionarios de la Administración central alcanzará por primera vez el 51% del presupuesto consolidado del Estado, incluyendo la Seguridad Social. 167.354 millones de un total de 327.955 millones. Estos cálculos no contemplan la nómina de empleados de comunidades y entidades locales.

La tendencia en el mercado laboral vasco sigue mostrando una evolución favorable, aunque en el mes de marzo se ha ralentizado en comparación con enero y febrero, según los datos difundidos ayer por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social- Frente a los dos primeros meses de sensible reducción en Euskadi en el número de parados, en marzo el saldo arroja sólo 71 desempleados menos, frente a un mayor dinamismo en el conjunto de España, que cerró el tercer mes del año con un descenso del 1,37%, lo que se traduce en 47.697 parados menos. De esta forma la cifra total de paro registrado se redujo hasta los 3,42 millones, la más baja de los últimos nueve años, según el ministerio. La razón del diferente ritmo del mercado laboral vasco respecto al del conjunto de España radica en el ‘efecto Semana Santa’, en que el turismo ha movilizado una mayor creación de empleo, pero que en el caso vasco el tirón de los turistas aún no tiene una traslación tan intensa, ni tan inmediata sobre el empleo.

Marzo ha cumplido su tradicional papel en el estacional mercado laboral español. Suele ser el mes en que se inaugura la buena época para el empleo. Y así ha sido en 2018, con la ayuda de una Semana Santa que esta vez cayó casi toda en el mes pasado. La afiliación a la Seguridad Social creció en 138.573 afiliados y ha superado los 18,5 millones de cotizantes con empleo por primera vez desde diciembre de 2008. También bajó el paro registrado, ha caído en 47.697 personas y se ha situado en 3,4 millones, según el Ministerio de Empleo.

A pesar de que el número de contratos temporales sobrepasan con mucho a las contrataciones indefinidas, lo cierto es que la evolución del mes de marzo resulta bastante favorable en materia de estabilidad laboral en comparación con tiempos pasados. Así en Euskadi el mes pasado se firmaron 7.332 contratos indefinidos, lo que supone un aumento del 13,66% sobre febrero y del 9,63% en la evolución interanual. La trayectoria para el conjunto de España muestra esta misma tendencia, se rubricaron 193.448 contratos indefinidos, casi un 11% más que el mes pasado y un 8,42% más que hace un año.

El gobernador del Banco de España, Luis Linde, afirmó ayer que faltan «varias décadas» para que la deuda española, actualmente situada en torno al 98% del Producto Interior Bruto (PIB), se sitúe por debajo del 60%. En 2007, antes de la crisis, la deuda estaba situada en el 37% del PIB, para pasar al 60% en 2010; en 2017 se situó en el 98,3% del PIB y las previsiones del Gobierno es que baje ligeramente hasta el 97,6%. «Las simulaciones del equipo del Banco de España muestran que, bajo asunciones plausibles, el proceso de desapalancamiento del sector público hasta niveles considerados seguros será gradual en España y en las economías desarrolladas en general, requiriendo, posiblemente, varias décadas para alcanzar el valor referente del 60% del ratio de deuda sobre el PIB» señaló en su discurso de apertura de la jornada Spain: From Recovery to Resilience, organizada por el Banco de España y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El número dos del Fondo Monetario Internacional (FMI), David Lipton, instó ayer a las autoridades españolas a proseguir con las políticas para corregir los desequilibrios de la economía. «Tomar medidas valientes durante una crisis, como hizo España, es extremadamente difícil; tomar medidas valientes durante los periodos de bonanza puede ser incluso más difícil, ya que puede haber menos voluntad política para actuar», afirmó Lipton. El subdirector gerente del Fondo destacó a continuación que ese es el punto en el que se encuentra España. «El vigoroso comportamiento de la economía visto durante los últimos años enmascara debilidades que todavía dejan al país vulnerable a los shocks», recordó. De ahí que recomendase aplicar más ajustes fiscales y dotar de una mayor flexibilidad al mercado de trabajo para poder hacer frente a futuras crisis.

ELA enfatizó ayer la imposibilidad de mantener el sistema público de pensiones si no mejoran las condiciones de los actuales contratos laborales, que la central tacha de «miserables». En un informe con propuestas al respecto presentado por su secretario general, Adolfo ‘Txiki’ Muñoz, el sindicato nacionalista insta a la generación de empleo de calidad e incrementos salariales superiores a la inflación. La central asocia las peores condiciones de trabajo a las reformas laborales y pide a su vez la supresión de los tijeretazos que ha sufrido el sistema de pensiones por parte de los gobiernos de Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero –con pullas a CC OO y UGT, que suscribieron la reforma socialista–. Entretanto, el sindicato celebra y juzga «imprescindible» el actual clima de movilización social.

Solo un día después de que el Comité de Expertos sobre Transición Energética presentara sus propuestas para transformar el sistema, plasmadas en más de 500 páginas, el ministro de Energía, Álvaro Nadal, rechazó una de las propuestas principales contenidas en el informe: el abaratamiento de hasta el 7% de la tarifa de la luz financiado con una subida de impuestos. La propuesta planteaba traspasar los costes pasados que ha acumulado el sistema energético, como las primas a las energías renovables, el déficit tarifario y los costes de generación extrapeninsulares, y que ahora paga el consumidor a través de la factura, a los Presupuestos Generales del Estado. Esto conllevaría un aumento del tipo del IVA general, que podría alcanzar el 22,3%, así como un alza del precio del gasóleo de automoción del 28,6%, de un 1,8% en la gasolina y de un 5,8% en el caso del gas.

El calendario laboral del próximo 2019 para el País Vasco presenta varias novedades con respecto al del presente año. Las más reseñables son que tanto el 19 de marzo, festividad de San José, como el 25 de julio, Santiago Apóstol, están incluidos entre los 12 festivos elegidos por el Gobierno vasco dentro de su proyecto de decreto remitido al Consejo de Relaciones Laborales de Euskadi. La razón de que estas dos fechas vuelvan a incluirse como festivos –ya han sido declaradas como tales en diversos años anteriores– se debe a que en 2019 tanto el 6 de enero, Día de Reyes, como el 8 de diciembre, la Inmaculada Concepción, caen en domingo.

El Ayuntamiento quiere que Zorrozaurre sea la isla de la innovación y del conocimiento, y el Gobierno vasco le va a echar una mano. Porque el Ejecutivo pretende diseñar el futuro de la Formación Profesional (FP) en Euskadi desde esa zona de Bilbao que está en pleno proceso de recuperación. El Departamento de Educación se ha comprometido a ubicar en el viejo edificio de oficinas de Vicinay Cadenas una sede de Tknika, el centro de referencia donde se idean los estudios para profesiones que, en muchos casos, aún ni existen. La sede actual de este equipamiento está en la localidad guipuzcoana de Rentería, y el plan es que, sin perder esa ubicación, traslade una parte importante de su actividad a la capital vizcaína.

El presidente mundial de Siemens, Joe Kaeser, tiene hoy una larga jornada en España, donde tratará de sellar la paz en Gamesa con el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, y de transmitir un mensaje de tranquilidad al lehendakari, Íñigo Urkullu, ratificando su apuesta por que la sede del fabricante de aerogeneradores siga en Zamudio, así como su compromiso con mantener a los proveedores locales. La reunión ha sido solicitada por Kaeser; se celebrará en el edificio central del Parque Tecnológico de Zamudio –donde hace diez días Gamesa reunió a sus accionistas en la junta general–, y se desarrollará a última hora de la tarde. Tanto lugar como hora son poco habituales para los encuentros del lehendakari con ejecutivos de grandes empresas, a los que suele recibir en Vitoria.