20170613

Los sindicatos ELA y LAB mostraron ayer su repulsa por la decisión de CC OO, UGT y la patronal española, CEOE, de impugnar el acuerdo marco de hostelería firmado en Euskadi. En una comparecencia conjunta ayer en Bilbao y encabezada por el secretario general de ELA, Adolfo ‘Txiki’ Muñoz, y el ‘número dos’ de LAB, Igor Arroyo, denunciaron un «boicot» a la negociación colectiva vasca y emplazaron a Confebask a mostrar «nítidamente» su rechazo frente a una actuación que obligaría a aplicar el convenio estatal. Las consecuencias: una rebaja salarial del 50% y un incremento de jornada de 50 horas.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, prevé que el segundo trimestre será «histórico» en términos de creación de empleo y arrojará un crecimiento del PIB «más fuerte» que el del periodo comprendido entre enero y marzo. Con ello, la economía podría crecer a un ritmo del 0,9% o incluso del 1%, como pronostica la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal. De Guindos señaló que espera que «la creación de empleo, que es el principal reto de la economía española, sea histórica en el segundo trimestre». El titular de Economía apostó además por mantener esta «inercia» durante los próximos tres o cuatro años, y para ello «hay que impedir que las reformas se reviertan».

El Gobierno da casi por hecho que la economía encadenará su tercer año consecutivo creciendo a un ritmo superior al 3%, tras hacerlo a una tasa del 3,2% tanto en 2015 como en 2016. Según Luis de Guindos, resultará «difícil» que termine haciéndolo por debajo de ese nivel. Su optimismo lo basa en la marcha de los indicadores adelantados que maneja el Ministerio de Economía, y que le hacen esperar que el avance del Producto Interior Bruto (PIB) entre abril y junio resulte «más fuerte» que el registrado de enero a marzo, un 0,8%. «La evolución reciente está superando las expectativas que teníamos», señaló ayer.

La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) revisó ayer cuatro décimas al alza su previsión de crecimiento del PIB para este año, hasta el 3,2%. Este pronóstico supone una mejora de medio punto porcentual respecto a las cifras oficiales que maneja el Ejecutivo y, de lograrse, supondría que España repetiría los mismos datos de crecimiento que en 2015 y 2016, esquivando la desaceleración por segundo año consecutivo. Esta mejora de previsiones viene apoyada sobre dos pilares fundamentales: la inversión y las exportaciones. La primera podría crecer un 4,8%, ocho décimas más que lo señalado hace unos meses. El mayor impulso en este campo lo dará la construcción residencial, que avanzará un 6,7% (frente al 5,1% indicado previamente), pero la compra de bienes de equipo también se acelerará, creciendo un 5,1% (1,1 puntos más que la previsión anterior).

El último informe anual de la Fundación Cotec para la innovación, presentado ayer, fue una señal de alarma. Cristina Garmendia, presidenta de Cotec, presentó los datos incluidos en el informe y aseguró que si la tendencia no cambia «de forma urgente», «no parece que España pueda desempeñar un papel protagonista ante las oportunidades y desafíos que prometen transformar aún más la sociedad que hoy conocemos».  Los datos muestran que los recortes acumulados desde 2010, del 50%, han sido muy superiores a los anunciados, del 30%. Esto se debe a que a la reducción de las cantidades consignadas en los presupuestos, se han unido unos decrecientes niveles de ejecución presupuestaria, que en 2016 han llegado a su histórico.

Muchas veces no queda otra que hacer de la necesidad virtud y el viceconsejero de Vivienda del Gobierno vasco, Pedro Jauregui, reconoció ayer que la construcción ha hecho los deberes al aprovechar la elevada edad media de los edificios de Euskadi –42 años– para apuntalar su recuperación en la comunidad autónoma. De hecho, el responsable autonómico reveló que la rehabilitación lidera ya «el nuevo ciclo postcrisis» que vive el sector: el año pasado se concedieron 3.145 licencias de obras y ocho de cada 10 se destinaron a reformas. A su juicio, se puede confirmar, por tanto, que se ha superado ya «una gran recesión» aunque, eso sí, después de que la pérdida del 40% de la actividad productiva provocara cierres de empresas y reducciones de plantilla que han acabado con 35.600 empleos desde 2008, el 43% de los que tenían las promotoras entonces.

Resulta evidente que a mayor edad, más paro de larga duración. Pero si supera los 55 años las probabilidades de encontar un trabajo caen de forma drástica. Tanto es así que seis de cada diez desempleados vascos mayores de 55 años creen que ya nunca podrán volver a desempeñar una actividad laboral remunerada. Aún así, es una proporción algo más optimista que la media del conjunto de España, donde son siete de cada diez integrantes de ese colectivo los que piensan que no encontrarán un nuevo empleo. Al menos eso son los datos que se desprenden de una encuesta realizada por la Fundación Adecco a 1.500 parados de más de 55 años, de los cuales 120 son de la CAV.

La aprobación de los Presupuestos Generales en el Congreso ha apaciguado el temporal de incertidumbre política, al menos hasta 2019, y cada vez más organismos mejoran sus previsiones de crecimiento de la economía española, que podría superar el 3% este año. El buen clima ha contagiado a los principales ejecutivos de compañías nacionales. El 82% de los consejeros delegados se muestra muy optimista sobre el crecimiento económico en España, frente al 68% en 2016. El porcentaje rebasa la media (79%) de los consejeros delegados respecto a sus mercados de origen, según se desprende del Informe Disrupción y Crecimiento, elaborado por KPMG, en base a una encuesta a más de 1.200 consejeros delegados de grandes empresas de 10 países. Los directivos españoles también ven con más optimismo el crecimiento global (76%) frente a la media (67%).

Esfuerzo, valentía o arrojo fueron ayer términos empleados por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, para referirse a los empresarios vascos y a su labor desarrollada durante los últimos años, sobre todo cuando el ejercicio de esa actividad ponía en peligro incluso sus propias vidas. Quienes apostaron de manera decidida por el desarrollo del Tren de Alta Velocidad (TAV) en Euskadi «sabemos que, desgraciadamente en el pasado, sufrieron la amenaza de ETA», aseguró con motivo de su visita a Vitoria. La ejecución de esas infraestructuras «era clave para mejorar su competitividad como empresas», pero se encontraron con la extorsión de la organización terrorista.

El ministro de Fomento Iñigo de la Serna pretende dar otro acelerón al calendario para conseguir que el nuevo trazado del Tren de Alta Velocidad (TAV) sea una realidad en el año 2023 y ayer anunció junto a la estación del ferrocarril de Vitoria que también para finales de ese año estará culminado el soterramiento y la nueva terminal en el centro de la ciudad. Sin estimaciones precisas en cuanto al coste, ni tampoco sobre el sistema concreto que se utilizará para construir los túneles, De la Serna anunció que será la ingeniería pública Ineco quien gestione el proceso administrativo y de proyectos con el objetivo de que las obras del soterramiento se inicien en el verano de 2020.

Ignacio Fernández Toxo dejará a finales de mes la Secretaría General de CCOO y, con ello, una larga vida en la primera fila del sindicalismo. Después tendrá que darse de alta en el paro y esperar cinco meses para poder jubilarse a los 65 años, con 46 de cotización a la Seguridad Social. En esta entrevista repasa la negociación salarial con los empresarios y el problema de la corrupción en España. El déficit de la Seguridad Social, la caída de la afiliación sindical o sus relaciones con el Gobierno, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, y la división de la izquierda.

En vísperas del comienzo de un inédito y complejo proceso —la salida de un Estado miembro de la UE— y en plena resaca de las elecciones en Reino Unido que han causado un terremoto en el país, Michel Barnier, el francés elegido por Bruselas para dirigir las negociaciones, se muestra duro con el Gobierno británico: «Estamos perdiendo el tiempo y no hay más tiempo que perder». En su primera entrevista como negociador, Barnier dice que Londres «ha subestimado las consecuencias del Brexit», pero eso no le exime de asumirlas en todos los órdenes. «No sé qué significa eso de Brexit duro o blando. El Brexit es la salida de Reino Unido de la UE. Hay que organizar este divorcio sin espíritu de venganza, sin castigos, pero tampoco vamos a ser ingenuos. Tendrá impacto, tendrá consecuencias».

La ejecutiva confederal de UGT y dos de sus tres federaciones (sector público e industria) se han desmarcado de un convenio que la tercera, la de servicios, había firmado con Adecco y con varios sectores de CC OO. No solo eso. La dirección de UGT ha ido más allá y ha denunciado el convenio ante la dirección general de Empleo en un escrito de 10 páginas en el que le piden que no lo registre y que lo lleve a los tribunales. La federación de servicios de UGT la dirige Miguel Ángel Cilleros, quien fuera candidato a suceder a Cándido Méndez y que perdió contra el actual líder del sindicato, Pepe Álvarez. Fuentes sindicales y académicas afirman que esta situación, en la que una confederación exige la retirada de la firma de un convenio a una de sus federaciones, no tiene precedentes en 40 años de negociación colectiva en democracia. Esto lo corroboran desde la ejecutiva confederal de UGT.

En la búsqueda de culpables sobre quiénes retiraron miles de millones hasta provocar la iliquidez y la crisis del Popular, el ministro de Economía, Luis de Guindos, afirmó ayer que Ayuntamientos y comunidades autónomas sacaron «grandes cantidades de dinero», «pero la Seguridad Social mantuvo sus saldos», negando informaciones que apuntaban lo contrario. El ministro calificó al Popular de «banco zombi desde hacía tiempo porque no concedía créditos». También apuntó que el Instituto de Auditoría pedirá explicaciones a PwC, auditor del Popular, por cerrar y luego reabrir las cuentas de 2016 para pedir provisiones.

La CNMV decidió ayer salir en defensa de Liberbank, antes de que el deterioro de su cotización bursátil desencadenara una fuga de depósitos como la que acabó con el Banco Popular. El supervisor prohibió durante un mes las ventas en corto (bajistas) de acciones de la entidad, después de que estas encadenaran diez sesiones a la baja que llevaron a la acción a perder el 44% de su valor. El regulador entiende que esos movimientos especulativos solo están relacionados con la intervención del Popular, que hizo perder todo su dinero a los accionistas, y no se compadecen con el estado real de Liberbank. La medida tuvo un efecto inmediato sobre la cotización de Liberbank, que se revalorizó un 41,2%.

Cambio de propietario en una de las principales infraestructuras vascas, la dársena de Bilbao, sin que en principio tenga consecuencias para los usuarios. La compañía de Hong Kong (China) Cosco Shipping Ports ha adquirido el 51% de Noatum, la empresa propietaria de la terminal de contenedores del Puerto de Bilbao. El grupo Noatum ha llegado a un acuerdo estratégico con Cosco para venderle ese porcentaje de su división Noatum Ports por una cifra de 203,5 millones de euros, según informaron ayer ambas empresas en sendos comunicados. La operación de compraventa incluye las terminales de contenedores que la compañía posee en Valencia (Noatum Container Terminal Valencia) y Bilbao (Noatum Container Terminal Bilbao), además de los puertos secos de Madrid (Conterail) y Zaragoza (Noatum Rail Terminal Zaragoza), las plataformas desde las que se mueven mercancías a los puertos a través de trenes .

Euskaltel ha reforzado su apuesta por las actividades investigadoras de Orkestra-Instituto Vasco de Competitividad de la Universidad de Deusto y, para ello, ha renovado su compromiso de apoyo e impulsará el desarrollo de la Cátedra de Economía Digital, creada recientemente. El acuerdo fue suscrito por Alberto García Erauzkin, presidente de Euskaltel, e Ignacio María Echeberria, por parte de Orkestra, hasta el año 2020.

Los ex presidentes dela Confederación Española de Pequeñas y Medianas Empresas (Cepyme) Jesús Bárcenas y Jesús Terciado defendieron ayer los salarios que percibieron por su «dedicación completa» al cargo, remuneraciones «conocidas por todo” y avaladas por la patronal CEOE, de la que «dependían las cuentas». Durante el juicio por presunta falsedad documental y apropiación indebida, los cinco acusados, integrantes de la antigua cúpula de Cepyme, indicaron que dependían para todas sus actuaciones de CEOE, tanto económicamente como a nivel de estructura, pues ésta decidía «desde los salarios hasta los puentes».